Hasta ahora he intentado caminar con
Pablo siguiendo sus pasos por Europa, sobre todo por Grecia, resultado del
viaje que realizamos la comunidad de la Purísima de Salamanca, siguiendo sus
pasos por Acaya y Macedonia en el verano de 2013. Ahora estamos preparando,
junto con José Manuel el sacerdote y Párroco de la comunidad, un viaje
siguiendo los pasos de Pablo en Asia. No es la primera vez que la comunidad
realiza ese recorrido, pero para un grupo numeroso de unas cuarenta personas,
es la primera vez. Estas reflexiones son el resultado de la preparación de
dicho viaje. No es sólo un viaje de estudios, también una peregrinación por los
lugares que pisó Pablo y las primeras comunidades cristianas. Es un blog de
reflexión sobre Pablo, sobre la búsqueda de Dios y el sentido de la vida.
Volveremos sobre Grecia en otros artículos y seguiremos colocando las fotos del
viaje de la comunidad. Ahora queremos seguir a Pablo por Turquía.
En el perfil de una persona la
pregunta por el origen es imprescindible, ya que él pose el secreto de lo que
somos. Conocer el lugar de nacimiento, el mundo en que vivió y creció, su
formación, por mis padres, de mis abuelos, es necesario, ya que nacemos
enraizados y condicionados por nuestro mundo. De ahí la importancia de la
ciudad que Pablo nació y el mundo en que se formó.
Es la ciudad de Pablo (Hch 9,11;
21,39; 22,3), el lugar de su nacimiento. Es una ciudad Helenística importante,
en ella trascurre gran parte de su juventud, antes de marchar a Jerusalén para
estudiar en la escuela de Gamaniel. "Yo
soy judío, originario de Tarso, ciudadano de una importante ciudad de
Cilicia", declara ante el tribuno romano que le pide información cuando
lo arresta en Jerusalén (Hech 21,39). Desde el año 64 a. C., Tarso era la
capital de la provincia romana de Cilicia, era un centro comercial importante,
ya que por la ciudad pasaba la vía que unía Siria con Anatolia.
Iglesia de San Pablo en Tarso |
Era un gran centro cultural.
Estrabón, en su Geografia, nos
comentaba que sus habitantes son tan
apasionados por la filosofía y tienen un espíritu tan enciclopédico que la
ciudad llegó a eclipsar a Atenas, a
Alejandría y a otras ciudades que se podrían recordad, por ser la cuna de la filosofía. En ella estaba asentada una floreciente
escuela estoica, rivalizando en época romana con Atenas y Alejandría.
Destacamos a filósofos como Posidonius, Aterodorus, Zenón de Tarso, Antipatro
de Tarso, este último no enseñó en un pórtico como era tradición en el
estoicismo, sino en su propia casa.
Puerta de Cleopatra |
Su nombre aparece en la Odisea, y proviene de la palabra griega tarsos, que designa un cedazo para
escurrir los quesos. Fue fundada por los Hititas, sobre el 1400 a C., era una
de las ciudades más importante de Kizwatna, el nombre que entonces recibía
Cilicia. Los pueblos del mar la arrasaron en torno al 1200 a. de C., pero no
tardó en ser reconstruida. Durante los siglos siguientes continuó desempeñando
un papel de primer orden aunque, eventualmente, cayó bajo el dominio asirio en
el 833 a. de C. con Salmanasar III y en el 698 a. de C. con Senaquerib. Con
posterioridad, y ya durante el Imperio persa, Tarso fue, primero, la capital de
un reino Cilente y, con posterioridad, la de la satrapía de Cilicia.
Los armenios en el siglo I,
conducidos por su rey, Tigranes el Grande, arrasa la ciudad, poco después será
asociada al imperio romano. Desde al año 64 a. C, Tarso conocerá un periodo de
paz, no solo será la capital de Cilicia, los romanos la llenarán de monumentos
y será uno de los puertos importantes del Mediterráneo.
Calzada romana del siglo I. |
Estaba situada a los pies de los
motes Taurus, a 16 km del curso inferior del río Cydnus, a unos cuarenta
kilómetros de las Puertas Cilicias. La fértil llanura, tan bien regada, de los
alrededores albergaba cultivos de cereales, uva y, sobre todo, lino, materia prima
esencial para la principal industria de la región. Más típico de la región era
la tela de fieltro que se fabricaba con lana de las cabras negras que pastaban
por los alrededores de Tarso. Este tejido de pelo de cabra, los romanos lo
llamaron cilicium, material muy
resistente a la humedad y al frío.
En el año 51 antes de Cristo había
tenido como procónsul a Marco Tulio Cicerón. Julio César la visitó en el año 47
a. C., debió causar un fuerte impacto en la ciudad, ya que le dieron el nombre
de Juliópolis. Unos años después, en el año 41, Tarso había sido el lugar del
primer encuentro entre Marco Antonio y Cleopatra. Encuentro que debió ser
espectacular, ya que la reina de Egipto, se adentró navegando el río Cydnus,
ataviada como si fuera la diosa afrodita. Con Octavio, Tarso conservará sus
privilegios y quedó exenta de los impuestos imperiales y la administración fue
confiada al estoico Atenodoro.
Pozo de San Pablo |
Según una tradición citada por san
Jerónimo, la familia de Pablo era oriunda de Giscala, situada al norte de
Nazaret. Debido a la ocupación romana, la familia tuvo que trasladarse a Tarso.
Posiblemente fuero prisioneros de guerra y vendidos como esclavos, debido a la
sublevación surgida a la muerte de Herodes el Grande. Pablo, heredó la
ciudadanía romana de sus padres, por lo que debieron ser manumitidos por sus
antiguos dueños. En su carta a los filipenses nos comenta «Aunque yo sí podría
confiar en lo humano; pues si alguno cree poder confiar en lo humano, más
podría yo: Fui circuncidado al octavo día; soy del linaje de Israel; de la
tribu de Benjamín; hebreo, hijo de hebreos y, por lo que a la ley se refiere,
fariseo» (3,4-5). Seguiremos indagando en su vida en otra de las entradas.
La Tarso turca de hoy, es una ciudad
de unos tres millones habitantes, con sus mezquitas y minaretes nada poco
recuerda el esplendor de la antigua ciudad. En mitad de una glorieta, cerca de
la estación de autobuses, hay una puerta maciza que se le ha dado el nombre de
Cleopatra. No lejos de allí, en una pequeña colina, entre eucaliptos, aparecen
restos de un teatro, unas termas y una galería cubierta, así como una muralla y
columnas en el centro de la ciudad.
Mosaico de Orfeo en Tarso |
Podemos destacar la Iglesia de San
Pablo. Una iglesia que data de 1102, aunque la actual es una basílica
reconstruida en el año 1862. En el techo hay un fresco impresionante de Jesús,
rodeado de los cuatro evangelistas.
Cazada romana en Sağlıklı |
Podemos destacar también una calzada
romana en el pueblo de Sağlıklı, a 14
kilómetros de Tarso, con una puerta en la propia calzada. El camino empedrado
es de una anchura de unos tres metros, construida en el siglo III d. C, en
época del emperador Caracalla.
Pero hay otra vía en plena ciudad, de unos 6,5 metros de
ancha, posiblemente del siglo I d. C.
Fue descubierto accidentalmente en el año 1993, construida en basalto y piedra.
¿Fue pisada por Pablo? Es posible.